Related Posts with Thumbnails

domingo, 18 de julio de 2010

5 (+1) estilos de dirección

Acabo de leer este artículo sobre liderazgo en El País, escrito a raíz del marcado estilo de dirección que Del Bosque utiliza como entrenador, y me ha venido a la mente los distintos tipos de jefe por los que he ido pasando a lo largo de mi trayectoria profesional. Coincido con el autor del artículo en que, en general, no existe un tipo ideal de jefe, sino que se necesitan personas capaces de adaptar su estilo en función de las necesidades concretas de la empresa o el equipo a dirigir.

También me gustaría señalar que útimamente al jefe se le suele llamar líder, aunque yo creo que en general se confunden los términos, ya que una cosa es que te nombren jefe y otra que te acepten como líder. Una vez leí en algún sitio que el poder te viene desde arriba ("te nombran jefe") mientras que la autoridad te llega desde abajo ("te aceptan como líder"). Por eso es tan importante el papel de "bisagra" que tenemos que realizar los que ahora llaman "mandos intermedios", aunque toda la vida hemos sido conocidos como "jefemierdas", dicho sea con todo el cariño.

Pues recopilando experiencias e ideas, he recordado haber pasado por, al menos los siguientes tipos de jefes (que no siempre líderes):
  • Terminator / Hulk (habla poco pero actúa mucho y casi siempre sin pensar)
  • El negociador (siempre está hablando -a veces incluso gritando- pero no decide)
  • El perro del hortelano (ni come ni deja comer)
  • Spiderman (trepa-muros... seguro que sabéis por dónde voy)
  • El hombre tranquilo (inalterable e inasequible al desaliento)
Lo cierto es que también se ha dado el caso de algún jefe que ha ido pasando por distintas etapas, evolucionando (el caso que recuerdo fue claramente un cambio a mejor), aunque es una minoría. En general, creo que un jefe trata siempre de imponer su estilo al equipo, en lugar de intentar adaptarse; aparentemente es más fácil, pero la realidad dice que es más difícil cambiar a varios que a uno...

Hay un tipo de jefe adicional que he decidido dejar para el final y dedicarle una mención especial:
  • El hombre invisible (o El hombre sin sombra)
Creo que está claro por qué... en mi vida profesional, he pasado por muchas situaciones complicadas... pero quizá la más frustrante es tener un jefe que no esté a la altura de las circunstancias, ni pretenda estarlo; que intente pasar lo más desapercibido posible, caiga quien caiga, y que nunca da la cara.

Me gustaría terminar proponiéndoos otro enlace a un artículo sobre la importancia de tener un buen jefe. La pregunta que me hago muchas veces es ¿reconoceríamos un buen jefe si lo viéramos, o sólo le daríamos el mérito una vez perdido -otro vendrá que bueno me hará-?


Si te ha gustado el post, puedes votarlo aquí:

votar

Facebook Twitter Meneame iGoogle My Yahoo My Live

Relacionado:
5 (+1) ideas sencillas sobre motivación

(Des)motivación profesional en el sector tecnológico

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aquí puedes dejar tus comentarios y opiniones, sean a favor o no respecto a la opinión expresada en el post. Lo único que te pido es que me ayudes a mantener el tono moderado del blog no incluyendo descalificaciones ni expresiones ofensivas hacia nadie.
Gracias por comentar !!